lunes, 2 de marzo de 2009

El tiburón Ballena

Te encuentras sumergido a más de 20 metros de profundidad, rodeado por la inmensidad del azul oscuro del océano Pacífico a más de 1000 km del continente más cercano; las intensas corrientes hacen que no te hayas sentido nunca tan indefenso como hasta ahora. La turbidez del agua y la cantidad de plancton que te rodea te impiden ver los acantilados de la Isla de Darwin, a pesar de que se encuentran a escasos metros. Estas a la espera de contemplar lo que has estado esperando durante tanto tiempo. De repente se acerca una masa oscura que tapa todo tu campo de visión, que va tomando definición a medida que se acerca. Te encuentras ante un monstruo marino del tamaño de una ballena con una gigantesca boca y aletas de proporciones inconmensurables. Se dirige en tu dirección tragando todo a su paso sin importar lo que se encuentre en medio. En este momento es cuando tu adrenalina se dispara, multiplicas el consumo de aire (ya no volverás a sentir lo mismo). Acabas de ver al pez más grande que existe.
Has cumplido tu sueño.



3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Que barbaridad, hasta 20 toneladas de peso! El reportaje muy bonito, pero yo nunca podré disfrutarlo en vivo y en directo (tengo pánico al agua)

gonxo dijo...

Pues es una lástima, porue el buceo es una experiencia sensacional que he tenido el privilegio de disfrutar. Ojala algún día pueda bucear con junto con estas sensacionales criaturas

Pilar dijo...

Con reportajes como este solo puedo decir "Que infinitamente pequeños somos los hombre".